La Cámara de Diputados de México aprobó una reforma que permitirá al Estado retomar el uso de las vías férreas para el transporte de pasajeros, marcando un avance significativo en el desarrollo de infraestructura de movilidad en el país. Con el respaldo de 24 congresos locales, se declaró constitucional la medida, que ahora pasa al Ejecutivo Federal para su promulgación y aplicación oficial.
Durante la Sesión de Pleno, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, anunció que la reforma modifica el artículo 28 de la Constitución Política, añadiendo un nuevo párrafo que establece el derecho del Estado a utilizar las vías ferroviarias para el transporte de pasajeros. Esta medida busca responder a la creciente demanda de alternativas de movilidad en el país y dará prioridad a proyectos que beneficien el transporte de pasajeros, por encima del transporte de carga en caso de conflicto.
El dictamen establece que el Ejecutivo Federal podrá otorgar concesiones a empresas públicas o particulares para operar los servicios de pasajeros en las vías ferroviarias. Las empresas que actualmente cuentan con concesiones para transporte de carga también tendrán la oportunidad de obtener permisos adicionales para el transporte de pasajeros, con la condición de dar preferencia a los pasajeros según las disposiciones legislativas.
La reforma ha sido respaldada por 24 entidades federativas, entre ellas Ciudad de México, Veracruz, Oaxaca, Baja California y Chiapas, quienes se pronunciaron a favor de la medida. Esta declaración de constitucionalidad subraya la importancia del transporte ferroviario en el desarrollo nacional y sitúa tanto el transporte de pasajeros como de carga como áreas prioritarias para el país, en los términos del artículo 25 de la Constitución.
Una vez que entre en vigor el decreto, el Congreso de la Unión tendrá un plazo de 180 días para hacer las adecuaciones necesarias en las leyes secundarias, lo cual permitirá que las modificaciones constitucionales se reflejen en la operación y regulación del sistema ferroviario.
Este cambio representa una apuesta hacia un modelo de movilidad más accesible y sostenible, buscando revivir el transporte ferroviario de pasajeros, que históricamente ha sido una alternativa económica y ecológica. Con esta reforma, se espera que las vías férreas no solo contribuyan al crecimiento económico, sino que también se conviertan en un motor de conexión y desarrollo social en todo el país.