El ataque sin precedentes a la embajada de México en Quito ha desatado una ola de repercusiones a nivel internacional y local. ¿Cuáles son las posibles consecuencias para Ecuador?
Según expertos consultados por la AFP, Ecuador podría enfrentar desde multas hasta sanciones diplomáticas por este acto sin precedentes.
El director de estudios latinoamericanos de la Universidad Andina Simón Bolívar, Esteban Nicholls, señala que ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), Ecuador podría recibir una sanción pecuniaria o ser apartado de comités y votaciones en organismos multilaterales como la OEA.
Nicholls también anticipa la defensa que Ecuador podría presentar ante la CIJ, argumentando que la embajada mexicana albergaba a un preso común, no a un perseguido político, lo cual podría poner en duda la legitimidad del asilo diplomático.
En el ámbito económico, el operativo tendría repercusiones importantes. Las negociaciones para un tratado de libre comercio entre México y Ecuador han quedado en pausa, lo que afectaría los planes de Ecuador para unirse a la Alianza del Pacífico y acceder al mercado asiático.
Además, la ruptura de relaciones diplomáticas por parte de países como Nicaragua y Bolivia, junto con el rechazo de gobiernos derechistas como Perú y Argentina, podría aislar aún más a Ecuador en la región.
A nivel interno, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se ha fortalecido políticamente al presentar el operativo como parte de su lucha contra la corrupción. Este movimiento, considerado drástico por algunos expertos, podría fortalecer su posición de cara a una consulta popular propuesta para otorgar mayores facultades a la fuerza pública en la lucha contra la delincuencia.
En resumen, el asalto a la embajada mexicana en Quito no solo tiene consecuencias diplomáticas y económicas para Ecuador, sino que también podría tener un impacto significativo en su política interna y en su posición en la región.
