La FIFA ha decidido no pronunciarse aún sobre la solicitud de la Federación Palestina de Fútbol (PFA) de suspender a su homóloga israelí, la Federación Israelí de Fútbol (IFA), en medio del conflicto que sacude la región desde el 7 de octubre. En lugar de tomar una decisión inmediata, el organismo mundial del fútbol ha lanzado dos investigaciones para abordar las acusaciones presentadas por Palestina.
La primera investigación tratará sobre las denuncias de “discriminación” que sostiene la PFA, mientras que la segunda examinará la participación de equipos israelíes que juegan en colonias ubicadas en Cisjordania, consideradas ilegales según el derecho internacional. Estas investigaciones buscan evaluar las reclamaciones palestinas de forma profunda antes de tomar una decisión.
Durante el 74º Congreso de la FIFA, el presidente Gianni Infantino rechazó someter a votación las sanciones solicitadas por la PFA, argumentando que cualquier medida debe ser gestionada por el Consejo Ejecutivo. En el comunicado más reciente, Infantino reiteró la necesidad de paz en la región, destacando que la violencia actual subraya la urgencia de encontrar una solución.
Conflicto en el deporte
La solicitud palestina ha generado un debate sobre la implicación del fútbol en conflictos políticos. La PFA instó a la FIFA a “ponerse del lado correcto de la historia” al votar la suspensión de Israel, mientras que la IFA calificó la petición como un “intento cínico” de perjudicar al fútbol israelí por motivos no relacionados con el deporte.
Israel y Hamás están en guerra desde el ataque del 7 de octubre, y el conflicto ha dejado miles de muertos, tanto en Israel como en Gaza. La violencia ha despertado llamados de la comunidad internacional, incluyendo expertos de la ONU, que instan a la FIFA a respetar la legislación internacional y combatir el racismo y la discriminación en el deporte.
