Con la urgencia de respuestas efectivas ante la creciente delincuencia, la Jefa de Gobierno electa de la Ciudad de México, Clara Brugada, ha propuesto una solución innovadora y coordinada: la creación de una Policía Metropolitana. Este cuerpo de seguridad no solo se encargará de combatir el crimen en la capital, sino también en las zonas conurbadas, reconociendo la naturaleza transfronteriza de la delincuencia que no conoce de límites administrativos.
Durante la XXII Sesión Ordinaria del Consejo Cuenca Lerma-Chapala en Toluca, Estado de México, Brugada destacó la importancia de una estrategia metropolitana integral que abarque no solo la seguridad, sino también problemas comunes como el suministro de agua y la gestión del medio ambiente. “La delincuencia se organiza de manera metropolitana y nuestros esfuerzos para combatirla también deben serlo”, afirmó Brugada ante un auditorio compuesto por funcionarios y expertos en seguridad y desarrollo urbano.
La propuesta de Brugada incluye la formación de un “Cabildo Metropolitano”, una plataforma donde autoridades estatales, municipales y representantes populares podrán tomar decisiones y generar programas que trasciendan las fronteras municipales y estatales. “Este cabildo será la piedra angular para que nuestras ciudades trabajen juntas, no solo para enfrentar la delincuencia, sino para mejorar la calidad de vida de todos nuestros ciudadanos”, explicó la Jefa de Gobierno electa.
Los datos duros respaldan la urgencia de esta propuesta. Según estadísticas recientes, la incidencia del crimen en áreas metropolitanas ha aumentado un 20% en los últimos dos años, impulsando la necesidad de una respuesta coordinada y efectiva. Alejandro Encinas, próximo titular de la nueva Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, señaló que la Policía Metropolitana permitirá una movilidad fluida de fuerzas de seguridad que podrán actuar en conjunto más allá de las barreras municipales y estatales. “Esto es esencial para cerrar espacios a la delincuencia que actualmente aprovecha las divisiones administrativas para evadir la justicia”, añadió Encinas.
La creación de la Policía Metropolitana y el Cabildo Metropolitano propuestos por Brugada han recibido una respuesta positiva en varios sectores, incluyendo líderes comunitarios y expertos en políticas públicas, quienes ven en esta estrategia un potencial transformador para la región. Sin embargo, también ha surgido escepticismo, particularmente en torno a los desafíos de implementación y la coordinación efectiva entre diferentes niveles de gobierno.
En su recorrido de agradecimiento por las 16 alcaldías de la Ciudad de México, Brugada ha hecho hincapié en que su administración se centrará en la seguridad como uno de los pilares fundamentales. “No solo vamos a mejorar la infraestructura y los servicios, sino que vamos a asegurarnos de que nuestra gente se sienta segura en sus hogares, en sus calles y en su vida diaria”, aseguró.
Además de la seguridad, Brugada ha reiterado su compromiso con proyectos ambientales y sociales que complementarán la labor de la Policía Metropolitana. “Con programas como Caminos Seguros, continuaremos iluminando y mejorando nuestras calles, lo que no solo disuade el crimen sino que también embellece y revitaliza nuestros espacios públicos”, dijo Brugada, delineando un enfoque holístico que busca no solo combatir la delincuencia sino también fomentar un ambiente urbano más amigable y seguro.
Mientras la propuesta de Brugada sigue ganando tracción, la expectativa de una mayor coordinación y eficacia en la gestión de la seguridad pública se eleva. La Ciudad de México y sus áreas conurbadas están ante la posibilidad de un cambio significativo en cómo se enfrenta el crimen, un cambio que podría servir de modelo para otras metrópolis enfrentando retos similares.
La comunidad espera ahora ver cómo estas propuestas se traducirán en acciones concretas y resultados tangibles una vez que Brugada asuma oficialmente el cargo.
