CIUDAD DE MÉXICO, 25MAYO2021.- Se abarrotan las “chelerias” en Tepito. Transeúntes y vecinos se reúnen en las chelerias de Tepito sin sana distancia ni cubrebocas. La ciudad se mantiene en semáforo amarillo y se continúa pidiendo a establecimientos colocar filtros sanitarios para evitar el contagio por COVID-19 exhortando también a la población a no bajar la guardia con medidas preventivas como el uso de cubrebocas. FOTO: ANDREA MURCIA /CUARTOSCURO.COM
Entran en vigor las nuevas sanciones aprobadas por el Congreso de la Ciudad de México contra las llamadas “chelerías”, que son puntos de venta ilegal de bebidas alcohólicas en la vía pública. Estas reformas representan un paso importante en el combate a la venta ilícita de alcohol, actividad que ha generado preocupación en torno a la seguridad y el orden público en la capital.
El objetivo principal de estas reformas es mejorar el orden público y la seguridad en la Ciudad de México, al frenar la expansión del comercio ilegal de alcohol. La venta no regulada de bebidas alcohólicas ha sido relacionada con problemas de seguridad, violencia, y desórdenes en diversas zonas de la ciudad, lo que ha generado una creciente preocupación entre los ciudadanos y las autoridades.
Con estas medidas, el gobierno capitalino busca reducir los índices de impunidad y garantizar que se respeten las normas establecidas para el comercio de bebidas alcohólicas. Además, se espera que el endurecimiento de las sanciones sirva como un disuasivo eficaz para evitar la reincidencia en estas prácticas ilegales.
¿Qué es una “chelería”?
Las “chelerías” son establecimientos informales, generalmente improvisados en calles y plazas, donde se venden bebidas alcohólicas sin contar con los permisos necesarios. En muchas ocasiones, estos puntos de venta no cumplen con las regulaciones sanitarias ni de seguridad, lo que incrementa el riesgo de desorden y problemas sociales, además de representar una competencia desleal para los negocios formales.
Reformas a la Ley de Cultura Cívica
En respuesta a la proliferación de estas prácticas, se realizaron modificaciones a la Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México. Una de las principales acciones fue la adición de la fracción V bis al artículo 28, así como la modificación del artículo 32 de dicha ley. Estas reformas establecen sanciones económicas más severas y medidas adicionales para quienes operen este tipo de establecimientos ilegales.
Multas y sanciones:
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Las personas que vendan alcohol sin permisos en la vía pública se enfrentarán a multas que van de 21 a 30 Unidades de Medida y Actualización (UMAs), es decir, entre 2 mil 171 y 3 mil 257 pesos.
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Los responsables también podrán ser arrestados de 25 a 36 horas, o bien, cumplir con trabajo comunitario de 12 a 18 horas.
Excepciones para festividades
Es importante señalar que esta normativa contempla una excepción para aquellos vendedores que cuenten con permisos temporales en ferias o festividades locales. Los eventos con autorización no se verán afectados por estas reformas, siempre y cuando se respeten las normativas establecidas.
Sanciones por violación de sellos de clausura
Otra de las reformas clave fue la modificación del artículo 286 del Código Penal local, que endurece las sanciones para quienes violen los sellos de clausura en establecimientos. Estas medidas buscan evitar que los negocios clausurados por operar de manera ilegal vuelvan a abrir sin cumplir con las regulaciones. Ahora, cualquier persona que retire o viole los sellos se enfrentará a:
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Penas de prisión de seis a 12 años.
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Multas que pueden alcanzar hasta 5 mil días de salario mínimo.
Las reformas no solo incluyen sanciones, sino también un incremento en las labores de supervisión por parte de las autoridades. Se espera que la policía, junto con las brigadas de inspección de la alcaldía, intensifiquen los operativos en zonas identificadas como puntos de venta clandestina de alcohol. Estas acciones de vigilancia serán clave para la correcta aplicación de las nuevas disposiciones legales.
Con la entrada en vigor de estas sanciones, los operativos para detectar “chelerías” y clausurarlas serán más frecuentes. Se espera que la ciudadanía también participe en esta labor, denunciando a los comercios irregulares y colaborando con las autoridades para mantener el orden en sus colonias.
Las nuevas reformas representan un avance en la lucha contra la venta ilegal de alcohol, un problema que no solo afecta a la seguridad y el orden, sino también a la salud pública y la economía local. El combate a las “chelerías” está en marcha, y las autoridades estarán más atentas que nunca para garantizar que se cumplan las normas y se respete el orden en la Ciudad de México.
