La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional (GN) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), llevó a cabo un filtro carretero en Tlalpan para combatir la tala ilegal, una actividad que pone en riesgo los ecosistemas de la capital.
El operativo se instaló estratégicamente en las inmediaciones del Ajusco, una de las zonas con mayor biodiversidad de la CDMX, donde la tala clandestina ha sido detectada como una de las principales amenazas al equilibrio ambiental. Este tipo de intervenciones buscan detener el transporte y comercialización ilegal de madera, una problemática que afecta severamente a los bosques de la región.
Personal especializado y tecnología de punta
Durante el operativo participaron más de 50 elementos de las distintas dependencias involucradas, quienes realizaron inspecciones a vehículos de carga y transporte que transitaban por las carreteras principales. Se utilizaron drones, cámaras de vigilancia móvil y binomios caninos para detectar posibles cargamentos ilegales de madera.
En el filtro carretero, se revisaron más de 200 vehículos en un solo día. Gracias a estas acciones, se logró detener el paso de dos camiones que transportaban madera sin la documentación necesaria, los cuales quedaron a disposición de las autoridades correspondientes para iniciar procesos legales.
Impacto ambiental y penalidades
La tala ilegal no solo impacta a la flora y fauna del Ajusco, sino que también contribuye al cambio climático y pone en peligro los mantos acuíferos de la zona. Por ello, las autoridades reforzarán estos operativos como parte de un plan integral para proteger los bosques de la CDMX.
Cabe destacar que los responsables de la tala clandestina pueden enfrentar penas de hasta nueve años de prisión y multas que superan los 3 millones de pesos, según la legislación vigente.
Con estas acciones, el Gobierno de la Ciudad de México reafirma su compromiso de garantizar la preservación de los recursos naturales y combatir las actividades ilícitas que los amenazan, invitando a la ciudadanía a denunciar cualquier actividad sospechosa a través de las líneas de emergencia.