En una resolución del sistema judicial mexicano, Carlos Ahumada Kurtz, empresario argentino con un pasado marcado por escándalos políticos y legales, ha recibido una suspensión definitiva de la orden de reaprehensión que pesaba en su contra. Este fallo impide que Ahumada sea detenido, tanto en territorio mexicano como internacionalmente, hasta que se resuelva el fondo de su juicio de amparo.
El Juzgado Decimocuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México, liderado por el juez Erik Zabalgoitia Novales, ha sido el escenario donde se ha concedido esta protección legal al empresario. La resolución fue publicada por el Consejo de la Judicatura Federal, subrayando que Ahumada no puede ser privado de su libertad por los actos, autoridades y términos precisados en el amparo.
Durante la cobertura de este desarrollo, diversos participantes y expertos compartieron sus opiniones. Enrique Ostos, abogado de Ahumada, manifestó su satisfacción con la decisión del juez, señalando que garantiza los derechos de su cliente mientras continúa el proceso legal. Por otro lado, voces críticas cuestionan la efectividad del sistema judicial y expresan preocupaciones sobre la posibilidad de que Ahumada pueda eludir la justicia.
El empresario fue extraditado a México el pasado 16 de julio desde Argentina, donde había sido detenido. A su llegada, fue notificado de la necesidad de presentarse ante el Juez de Ejecución para cumplir con la sentencia pendiente, que asciende a un año, diez meses y veintitrés días de cárcel; sin embargo, gracias a la suspensión previamente otorgada, Ahumada no fue detenido.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, que acusa a Ahumada de fraude genérico, sigue buscando que se cumpla la pena impuesta y se realice la reparación del daño, valorada en aproximadamente 30 millones de pesos. Este dinero correspondería a las afectaciones causadas a las delegaciones de Tláhuac y Gustavo A. Madero.
Se espera que el próximo 21 de agosto tenga lugar una audiencia crucial donde se discutirá la posibilidad de anular el procedimiento penal contra Ahumada. Este evento será clave para determinar el curso futuro de este caso emblemático, que ha capturado la atención pública y mediática debido a sus implicaciones políticas y sociales.
Este caso no solo pone a prueba los mecanismos de justicia en México sino que también refleja las complejidades del sistema legal y sus interacciones con figuras públicas controvertidas. La decisión final sobre el caso de Carlos Ahumada podría sentar un precedente importante en cómo se manejan los casos de extradición y las protecciones judiciales en el país.
