La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, inauguró la primera planta de llenado de garrafones del programa “Agua Bienestar”, ubicada en la alcaldía Coyoacán. Este proyecto forma parte de las medidas que su administración está implementando para enfrentar la crisis de escasez de agua que afecta a diversas zonas de la capital.
La planta tiene una capacidad de llenado de 200 garrafones diarios de agua potable para consumo humano. El objetivo es que estos garrafones sean distribuidos a las colonias, pueblos y barrios que más lo necesiten, a un precio accesible de cinco pesos por garrafón. La meta a largo plazo es instalar entre una y cuatro plantas garrafoneras en cada alcaldía, con una producción diaria de hasta 200,000 garrafones.
El programa Agua Bienestar es solo una de las estrategias que Brugada presentó para resolver la escasez de agua en la ciudad. Entre las medidas adicionales, destacan la rehabilitación de pozos y plantas de tratamiento, así como la infiltración de aguas pluviales y tratadas. Con estos esfuerzos, la jefa de Gobierno estima que la mayoría de los problemas relacionados con la escasez de agua estarán resueltos en los próximos años.
Además, Brugada reveló que el Sistema Cutzamala —fuente vital de abastecimiento de agua para la Ciudad de México— reducirá su suministro a la capital en los próximos dos años. En lugar de los niveles actuales, que rondan los 8 metros cúbicos por segundo, la ciudad recibirá solo la mitad del agua que se enviaba en 2024. Esta reducción busca garantizar la recuperación de las presas que alimentan el sistema, las cuales actualmente están al 65% de su capacidad.
El suministro de agua que faltará se cubrirá mediante pozos del Sistema Lerma, según anunció la Secretaría de Gestión Integral del Agua. Mario Esparza, titular de la dependencia, aseguró que, a pesar de esta disminución, habrá suficiente agua para abastecer las necesidades de los habitantes de la Ciudad de México.
Con el lanzamiento de Agua Bienestar, la administración de Brugada da un paso significativo hacia un modelo más sostenible y equitativo en el acceso al agua, buscando reducir los impactos de la escasez y garantizar un suministro seguro para todos los capitalinos.