Un brote de virus coxsackie ha encendido las alarmas en las escuelas primarias Emiliano Zapata y Juan Escutia, ubicadas en la capital del estado de Tlaxcala. Hasta el momento, se han confirmado 12 casos, incluidos el de una maestra y sus dos nietos. Ante esta situación, directivos, maestros y padres de familia se han movilizado para detener la propagación del virus mediante labores de limpieza y desinfección en ambos planteles.
El brote comenzó la semana pasada, cuando siete niños presentaron síntomas como fiebre, dolor de cabeza, erupciones cutáneas y llagas en la boca. A lo largo del fin de semana, el número de contagios aumentó, lo que llevó a las autoridades escolares a suspender clases el viernes y el lunes para realizar la limpieza exhaustiva de las instalaciones. Se desinfectaron salones, butacas y materiales escolares para garantizar un ambiente más seguro para los estudiantes.
Graciela Esperanza Panduro Carmona, directora de la Escuela Primaria Emiliano Zapata, informó que el número de casos se ha incrementado. “Hasta el día jueves teníamos siete casos confirmados, y ahora ya suman doce, entre ellos una maestra y dos de sus nietos”, explicó la directora. Ante la situación, la dirección de ambas escuelas solicitó la intervención de las autoridades de salud para recibir apoyo y frenar el brote.
Padres de los niños afectados han confirmado que sus hijos están recuperándose satisfactoriamente. Arturo Velázquez, padre de uno de los primeros casos, aseguró que su hijo siguió el protocolo de aislamiento de dos semanas recomendado por las autoridades y que ya se encuentra en buenas condiciones.
El virus coxsackie, altamente contagioso, es común entre los niños pequeños y se transmite fácilmente en ambientes concurridos como escuelas. Las medidas de prevención incluyen el lavado frecuente de manos y la limpieza constante de superficies.
