Este lunes, normalistas de Ayotzinapa llevaron a cabo una serie de movilizaciones en Chilpancingo, Guerrero, que culminaron con un bloqueo intermitente en la Autopista del Sol. Los estudiantes, argumentando la falta de respuesta a su pliego petitorio entregado al gobierno estatal, realizaron actos de vandalismo y se llevaron vehículos de empresas y del gobierno.
El conflicto inició cuando un grupo de jóvenes llegó al edificio de la Subsecretaría de Administración y Finanzas de la Secretaría de Educación de Guerrero, conocido como “La Casa Blanca“. Los normalistas lanzaron tres petardos al interior de las oficinas, en protesta por la falta de respuesta a sus demandas. Entre las peticiones se incluyen la entrega de equipo escolar, uniformes, plazas y otros materiales.
Posteriormente, los estudiantes se dirigieron al sur de Chilpancingo, al lugar conocido como “El Parador del Marqués“. Ahí, realizaron un bloqueo intermitente de la Autopista del Sol, una de las principales vías de comunicación de la región. Durante el bloqueo, el subsecretario de Asuntos Políticos del estado, Francisco Rodríguez Cisneros, acudió al lugar para dialogar con los manifestantes. Tras las conversaciones, se acordó una mesa de trabajo y el bloqueo fue levantado a las 12:15 pm, después de dos horas.
Robos y vandalismo
Además del bloqueo, los normalistas se llevaron ocho vehículos distribuidores de productos alimenticios y del gobierno. Intentaron llevarse cinco vehículos más, pero no lo lograron debido a que las alarmas se activaron, obligándolos a abandonarlos. La Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP) informó que personal de Tránsito brindó apoyo vial en el área para agilizar la circulación y evitar congestionamientos.
En respuesta a los hechos, elementos de la Policía Estatal reforzaron la seguridad en la región de Tierra Caliente. Realizaron recorridos de seguridad y prevención sobre el tramo carretero Coyuca-Santa Teresa-Zirándaro de los Chávez, con el objetivo de prevenir delitos y salvaguardar la integridad de la población. Además, establecieron puntos de atención en las localidades de La Calera, Pandacuareo y El Naranjo, brindando orientación y auxilio a quienes lo necesitaran.
Los normalistas de Ayotzinapa han estado en conflicto con las autoridades estatales debido a la falta de respuesta a sus demandas. La situación en Guerrero es tensa, y estas movilizaciones reflejan la frustración de los estudiantes ante la aparente inacción del gobierno. Las acciones de hoy, aunque polémicas, buscan llamar la atención sobre sus necesidades y obtener una respuesta concreta a sus peticiones.
La situación en Guerrero continúa siendo monitoreada de cerca, y se espera que las negociaciones entre los normalistas y el gobierno estatal lleguen a una solución que beneficie a ambas partes y evite futuros conflictos.
