El Congreso de la Ciudad de México ha emitido un llamado urgente a las autoridades para que realicen una inspección exhaustiva en el Auditorio Nacional, tras la viralización de denuncias sobre la presencia de chinches en sus instalaciones. La diputada Elizabeth Mateos destacó la importancia de garantizar las condiciones y estándares sanitarios en este emblemático recinto, que tiene una capacidad para 10 mil personas.
Durante la sesión, la legisladora local de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Elizabeth Hernández, enfatizó que proteger la salud de los asistentes no solo es una obligación moral, sino también un deber legal y sanitario. “Es crucial que los espacios de alto impacto cumplan con los más altos estándares de seguridad sanitaria para proteger a sus visitantes”, subrayó, instando a la Operadora de Centros de Espectáculos S. A., encargada del auditorio, a tomar medidas efectivas.
La preocupación por la presencia de chinches es justificada, ya que este tipo de plagas se propaga con rapidez y puede transferirse a través de las pertenencias de los visitantes, como bolsas, mochilas, maletas, ropa e incluso calzado. Hernández alertó que esto podría afectar a un número creciente de personas que visitan el recinto, poniendo en riesgo su salud y bienestar.
En respuesta a estas denuncias, el Auditorio Nacional se deslindó del problema, asegurando que “se cumplen con los más exigentes requerimientos de limpieza y fumigación”, pero esta declaración no ha sido suficiente para calmar las preocupaciones de los legisladores y el público en general. La diputada recordó que la higiene en espacios públicos debe ser una prioridad, y que cualquier indicio de infestación debe ser tratado con la seriedad que amerita.
La petición del Congreso no solo busca abordar la situación actual, sino también establecer un precedente para garantizar que otros recintos culturales y de entretenimiento mantengan estándares sanitarios óptimos. La salud de los ciudadanos es una responsabilidad compartida entre las autoridades y los operadores de estos espacios.
Con esta situación, el Congreso de la CDMX reafirma su compromiso de velar por la salud pública y garantizar que los lugares de entretenimiento sean seguros para todos los visitantes. La esperanza es que, a través de estas acciones, se puedan prevenir futuros problemas de salud y asegurar una experiencia placentera en el Auditorio Nacional y otros espacios similares.
