Las autoridades sanitarias mexicanas confirman la presencia de la variante JN-1, conocida como “Pirola”, del virus SARS-CoV-2 en la Ciudad de México. Aunque es altamente contagiosa, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), no parece causar una enfermedad más grave en comparación con otras variantes.
El Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) y el Instituto Nacional de Medicina Genómica (Inmegen) informaron sobre la detección de esta subvariante después de secuenciar 150 muestras de la capital. La Secretaría de Salud destaca que la constante circulación del virus puede generar cambios en los sublinajes virales, como el caso de Pirola.
La OMS clasifica a Pirola como una variante de bajo monitoreo, y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. indican que aún es temprano para evaluar completamente sus impactos.
Aunque Pirola es altamente contagiosa, los síntomas informados no indican una enfermedad grave. Los afectados pueden experimentar dolor de garganta, congestión, estornudos, fiebre, pérdida de olfato, dolor muscular, afonía y ronquera. Se recomienda el aislamiento para evitar la propagación.
La Secretaría de Salud reitera las recomendaciones para prevenir contagios, como permanecer en casa en caso de síntomas respiratorios, ventilar lugares cerrados y lavarse las manos regularmente. En casos de síntomas graves, se aconseja buscar atención médica urgente.
La población debe mantenerse informada y seguir las medidas preventivas para contribuir a contener la propagación de esta variante y proteger la salud comunitaria.
