El terremoto de magnitud 6.8 que se extendió por la región del Tíbet el martes por la mañana, ha dejado un saldo de al menos 126 muertos, cientos de heridos y graves daños estructurales, según informaron las autoridades chinas. El epicentro se localizó en el condado de Tingri, una zona montañosa cerca del Monte Everest, a una profundidad de 10 kilómetros, de acuerdo con el Centro de Redes Sismológicas de China.
Impacto devastador en la región
El terremoto ocurrió a las 09:05 horas (hora local), y se sintió en Nepal, India y Bután, provocando pánico entre los habitantes. En el condado de Tingri, conocido como la puerta norte del Everest, más de mil viviendas quedaron destruidas, dejando a cientos de personas sin hogar en un área que ya enfrenta desafíos por su altitud promedio de 4,200 metros.
En Shigatse, ciudad tibetana que alberga a 800 mil personas, los equipos de rescate trabajaron arduamente para buscar sobrevivientes entre los escombros. Videos difundidos por las autoridades muestran fachadas de edificios colapsadas y calles llenas de escombros.
El presidente chino, Xi Jinping, ordenó desplegar más de 3 mil rescatistas, junto con 22 mil suministros de emergencia, incluidas tiendas de campaña y ropa de abrigo. Además, el gobierno asignó 100 millones de yuanes (aproximadamente 13.6 millones de dólares) para las labores de ayuda.
En Nepal, el sismo despertó a los residentes de Katmandú, quienes evacuaron sus hogares en medio del pánico. Aunque se sintió con fuerza, no se reportaron víctimas fatales en este país.
Más de 50 réplicas se registraron en las tres horas posteriores al terremoto, intensificando el temor en la región. La zona del Everest, del lado chino, fue clausurada por seguridad, mientras los rescatistas continúan trabajando.
Zona de alta actividad sísmica
El Himalaya es una de las regiones más propensas a terremotos debido a la colisión de las placas tectónicas de India y Eurasia. En 2015, un sismo de magnitud 7.8 en Nepal dejó 9 mil muertos, mostrando los riesgos recurrentes de esta zona.
Este terremoto subraya la necesidad de fortalecer la preparación y respuesta ante desastres en regiones vulnerables como el Tíbet y el Himalaya, donde las condiciones extremas dificultan los trabajos de rescate y reconstrucción.