El próximo 6 de enero de 2025 marcará el inicio de un programa que promete cambiar la manera en que los capitalinos acceden al agua potable. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, anunció el arranque de Agua del Bienestar, un proyecto enfocado en ofrecer garrafones de agua purificada a un precio simbólico de 5 pesos. Este esfuerzo tiene como objetivo combatir las desigualdades en el acceso al recurso y atender las necesidades de las zonas más vulnerables.
Agua al alcance de todos
Durante la inauguración de la primera planta purificadora de Agua del Bienestar en Xotepingo, Brugada destacó que este programa es parte de su estrategia para garantizar el derecho al agua en toda la ciudad. “Mientras algunas zonas tienen acceso a 500 litros diarios por habitante, otras enfrentan una grave escasez. Esto es un acto de justicia social, no solo una promesa de gobierno,” expresó la mandataria.
El programa tiene previsto instalar plantas purificadoras en las 16 alcaldías, con una producción estimada de 200 mil garrafones por semana. Los puntos de venta iniciales incluirán:
- Utopías
- Centros Comunitarios
- Módulos de Atención Ciudadana
- Pilares
¿Cuánto costarán y qué incluye?
El precio de los garrafones es uno de los puntos más llamativos del programa. Cada unidad de 19 litros costará únicamente 5 pesos, independientemente de la alcaldía o zona donde se adquiera. Este precio, significativamente más bajo que el del mercado convencional, busca garantizar que incluso las familias de bajos recursos puedan acceder al agua potable.
El secretario de Gestión Integral del Agua, Mario Esparza Hernández, explicó que los estándares de calidad de estas plantas cumplen con normativas nacionales e internacionales, asegurando que el agua sea apta tanto para consumo humano como para usos domésticos.
Enfoque integral
El programa no solo se limita a la distribución de agua. También incluye una estrategia de sensibilización sobre el uso responsable del recurso. Brugada mencionó que se implementarán campañas educativas en las comunidades beneficiadas para fomentar prácticas sostenibles y el cuidado del agua.
El gobierno también planea extender el alcance de las plantas purificadoras para que las zonas más remotas y con mayores carencias sean atendidas prioritariamente. Se estima que en la primera etapa el programa abarcará 738 colonias, pueblos y barrios con mayor necesidad.
Sin embargo, también han surgido algunas críticas. Expertos como Gerardo Mendoza, especialista en gestión de recursos hídricos, advierten que el reto más grande será mantener la operación de las plantas a largo plazo. “El precio es muy accesible, pero el gobierno deberá garantizar un presupuesto constante para mantener la calidad y la distribución,” señaló.
Compromiso a largo plazo
Brugada dejó en claro que el tema del agua será una prioridad durante su administración. “El agua es un derecho, no un privilegio. Este programa no es una obligación de gobierno, es una convicción,” afirmó en su discurso.
Además, adelantó que Agua del Bienestar es solo una pieza de un plan integral que incluye la rehabilitación de infraestructura hidráulica, la reducción de fugas y la construcción de nuevas redes de distribución en áreas marginadas.
El programa iniciará formalmente su distribución el 6 de enero de 2025, con garrafones disponibles en los puntos establecidos. A medida que más plantas purificadoras entren en operación, se espera que el acceso al agua potable mejore significativamente para los capitalinos.
Con iniciativas como Agua del Bienestar, el gobierno de la Ciudad de México busca cerrar la brecha de desigualdad en el acceso a recursos básicos. ¿Será este programa un ejemplo a seguir para otras ciudades del país? El tiempo y la implementación adecuada serán los mejores jueces.