‘Los Chapitos’ aún sin acuerdo definitivo con la Corte de Chicago
En una audiencia llevada a cabo en el Tribunal de Distrito Norte de Illinois, los hermanos Joaquín y Ovidio Guzmán López, conocidos como “Los Chapitos” e hijos del exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán, aún no han concretado un acuerdo con la Fiscalía de Estados Unidos. A pesar de las negociaciones en curso, el caso sigue sin resolución y se espera que las decisiones claves se definan en audiencias programadas para febrero y marzo de este año.
Ambos hermanos enfrentan cargos graves relacionados con narcotráfico, blanqueo de dinero y posesión ilícita de armas, en un esfuerzo del Departamento de Justicia de Estados Unidos por combatir la distribución de drogas sintéticas, incluyendo el fentanilo, uno de los problemas más críticos de salud pública en el país.
Durante la audiencia, presidida por la jueza Sharon Johnson Coleman, se informó que Ovidio Guzmán, alias “El Ratón”, enfrenta acusaciones adicionales en el Distrito Sur de Nueva York, lo que complica las negociaciones actuales para un acuerdo de culpabilidad “global”. El fiscal Andrew Connor Erskine explicó que aún se necesita tiempo para evaluar si un acuerdo conjunto cubriría todos los casos en contra de los hermanos.
Los cargos en detalle
Ovidio Guzmán López fue arrestado el 5 de enero de 2023 en Sinaloa y extraditado en septiembre del mismo año. Durante su primera audiencia en Chicago, se declaró “no culpable” de cinco cargos principales, entre ellos:
- Conspiración para distribuir droga.
- Pertenecer a una empresa criminal.
- Exportar narcóticos a Estados Unidos.
- Realizar transacciones financieras con dinero obtenido de actividades ilícitas.
- Portación y uso de armas de fuego.
Por su parte, Joaquín Guzmán López, detenido en julio de 2024 cerca de El Paso, Texas, enfrenta cargos similares. Fue arrestado mientras viajaba en un avión privado acompañado de Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa. Ambos permanecen detenidos sin derecho a fianza.
Estrategia de la Fiscalía
El fiscal Erskine aseguró que la Fiscalía de Estados Unidos trabaja para alcanzar un acuerdo que permita a los hermanos evitar el juicio a cambio de convertirse en testigos colaboradores, sin embargo aún no se han presentado avances significativos. “Estamos explorando todas las opciones, incluida una resolución global que pueda abarcar los casos en Nueva York y Chicago”, declaró Erskine.
De no lograrse un acuerdo antes de las fechas pautadas, ambos enfrentarían juicios por separado. La audiencia para Ovidio Guzmán está programada para el 27 de febrero, mientras que Joaquín comparecerá el 19 de marzo.
El abogado de los Guzmán López, Jeffrey Lichtman, conocido por haber defendido a “El Chapo” y a su esposa Emma Coronel, participó en la audiencia de manera remota. Lichtman destacó la complejidad de las negociaciones y reiteró que sus clientes continúan declarándose “no culpables”. “Estas acusaciones requieren un análisis cuidadoso, y estamos comprometidos a buscar la mejor resolución posible para mis clientes”, afirmó.
La detención y procesamiento de “Los Chapitos” representa uno de los esfuerzos más importantes en la lucha contra el narcotráfico entre México y Estados Unidos. La extradición de Ovidio Guzmán, en particular, fue considerada un triunfo para la cooperación bilateral en materia de seguridad. Sin embargo, expertos advierten que la caída de estos líderes no significa el fin del Cártel de Sinaloa, ya que otras figuras dentro de la organización han comenzado a ocupar posiciones clave.
Impacto del fentanilo
El fentanilo es una de las principales sustancias que el Cártel de Sinaloa distribuye a gran escala en Estados Unidos. Según la DEA, este opioide sintético ha sido responsable de más de 70,000 muertes anuales por sobredosis en el país. La agencia considera a “Los Chapitos” como actores clave en la expansión de esta droga, lo que explica la prioridad de sus casos dentro del sistema judicial estadounidense.
Mientras las negociaciones avanzan lentamente, la presión sobre “Los Chapitos” sigue aumentando. La Fiscalía busca no solo justicia por los crímenes cometidos, sino también desarticular las redes operativas del cártel. Por su parte, la defensa espera reducir las posibles sentencias mediante acuerdos de cooperación que beneficien a sus clientes.
Con las fechas de las audiencias cada vez más cercanas, las decisiones que se tomen en este caso podrían sentar precedentes importantes en la lucha contra el narcotráfico y el impacto del crimen organizado en la región. La atención estará puesta en los juzgados de Nueva York y Chicago, donde el futuro de los hermanos Guzmán López será definido.