El legendario Mike Tyson, de 58 años, está listo para volver al ring tras 19 años de ausencia. Este viernes, el AT&T Stadium en Arlington, Texas, será el escenario del esperado combate de exhibición entre Tyson y el influencer convertido en boxeador, Jake Paul.
El enfrentamiento ha generado una intensa expectativa, en parte por la personalidad explosiva de ambos participantes. Durante el pesaje, Tyson, conocido como “El hombre más malo del planeta”, no ocultó su desdén hacia su rival. Con un peso de 228.4 libras, el excampeón mundial se acercó a Paul, lo abofeteó y declaró: “Se acabó la charla”, antes de retirarse del escenario.
Por su parte, Jake Paul, quien pesó 227.2 libras, respondió con provocaciones más agresivas. “Está enojado, es un pequeño elfo enojado. Esto ya es personal: ¡tiene que morir!”, exclamó el influencer, quien ha construido una carrera en el boxeo tras ganar notoriedad como creador de contenido en YouTube.
El combate marca un hito en el entretenimiento deportivo al ser el primer evento de boxeo transmitido en vivo por Netflix, plataforma con más de 280 millones de suscriptores. Esta incursión en el boxeo busca atraer tanto a fanáticos tradicionales como a una nueva audiencia.
Aunque el evento ha captado atención global, también ha sido objeto de críticas. El reconocido promotor británico Eddie Hearn lo calificó como “peligroso, irresponsable y una falta de respeto para el boxeo”. Según los detractores, la pelea no debería involucrar a un boxeador retirado como Tyson contra un influencer con solo cuatro años de experiencia en el deporte.
A pesar de las controversias, el combate promete ser un espectáculo mediático que reunirá a fanáticos de todo el mundo frente a las pantallas.