15 noviembre, 2024

 

La reciente ola de violencia en Guerrero ha reavivado el debate sobre la definición y tratamiento del crimen organizado en México. En menos de 24 horas, dos incidentes distintos dejaron al menos 15 personas asesinadas, incluidos dos menores de edad, generando alarma y un llamado urgente de diversos sectores.

 

Ante esta situación, el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, criticó duramente la postura de la presidenta Claudia Sheinbaum y pidió que los actos violentos cometidos por el crimen organizado sean tipificados como narcoterrorismo.

 

Cortés expresó su indignación en redes sociales, señalando la necesidad de reconocer la gravedad de la violencia en México y de aceptar ayuda internacional para enfrentarla. “Presidenta Claudia Sheinbaum, si esto no es narcoterrorismo, ¿entonces qué es?” publicó en su cuenta de X, agregando que “es urgente tipificar este delito que tanto dolor causa a las familias mexicanas y aceptar la colaboración internacional para combatir a la delincuencia organizada en nuestro país”.

 

La propuesta de Cortés no se limita a la tipificación del crimen organizado como narcoterrorismo; también insta a aprovechar la “buena voluntad” del virtual presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, quien ha manifestado su intención de combatir al crimen organizado en México mediante un acuerdo coordinado. “No es sumisión, sino una coordinación efectiva que dé resultados y ponga fin a los grupos delictivos que controlan gran parte del país”, explicó el dirigente del PAN.

 

Respuesta de Claudia Sheinbaum: “Ridículo o Traidor a la Patria”

Las declaraciones de Cortés no pasaron desapercibidas por la presidenta Sheinbaum, quien calificó el llamado del dirigente panista como “ridículo” y “traidor a la patria”. La mandataria aseguró que la intervención de fuerzas extranjeras en el país es una muestra de falta de confianza en las capacidades mexicanas para resolver sus propios problemas y que, además abrir la puerta a dicha intervención es una postura “racista y clasista”.

 

Sheinbaum defendió el esfuerzo del gobierno mexicano en la lucha contra el crimen organizado, argumentando que México es un país con una historia de superación ante la adversidad. “Tenemos un pueblo extraordinario y hemos salido adelante con unidad. No necesitamos que vengan de afuera a resolver nuestros problemas. El respeto a nuestra soberanía es fundamental”, señaló la mandataria en su mensaje.

 

Contexto de la violencia en Guerrero

La situación en Guerrero ha sido motivo de preocupación tanto a nivel nacional como internacional debido a los niveles alarmantes de violencia que afectan a diversas comunidades. En este caso, se reportó el hallazgo de 11 cuerpos en una camioneta abandonada en Chilpancingo, y unas horas después, cuatro cuerpos más fueron encontrados en Acapulco. Las víctimas presentaban señales de tortura, y aunque la Fiscalía de Guerrero ha iniciado una investigación, hasta el momento no se han hecho públicos mayores detalles.

 

El senador y líder del PAN sostuvo que estos actos no solo representan un desafío para el gobierno, sino que también evidencian una crisis de seguridad que requiere acciones contundentes. “Lo que está ocurriendo no solo es criminalidad; es un acto de terror que está paralizando a comunidades enteras”, insistió Cortés, reiterando su propuesta de colaboración con Estados Unidos en este frente.

 

La propuesta de Narcoterrorismo y la colaboración internacional

El llamado de Cortés para catalogar el crimen organizado como narcoterrorismo no es nuevo, pero ha cobrado fuerza a medida que la violencia en el país escala a niveles preocupantes. Al tipificar ciertos actos violentos como narcoterrorismo, se busca que el gobierno mexicano pueda activar mecanismos de cooperación con instancias internacionales, incluyendo la participación de agencias estadounidenses como la DEA o el FBI.

 

“Es necesario reconocer que la delincuencia organizada en México ha alcanzado niveles que solo pueden ser comparados con actos de terrorismo. Al aceptarlo como tal, podríamos contar con los recursos y el apoyo necesarios para hacer frente a esta crisis de seguridad”, explicó Cortés.

 

Sin embargo, el término “narcoterrorismo” implica una connotación compleja, que involucra posibles repercusiones diplomáticas y de soberanía, algo que Sheinbaum y otros miembros de su administración rechazan categóricamente.

La propuesta de Cortés ha suscitado opiniones divididas entre políticos, analistas y ciudadanos. Algunos ven con buenos ojos la colaboración internacional, mientras que otros defienden la capacidad de México para resolver la crisis de seguridad de manera autónoma. “Es muy sencillo recurrir a la ayuda de potencias extranjeras, pero hacerlo pondría en riesgo la soberanía del país”, opinó Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación.

 

Llamada a la revisión de la Estrategia de Seguridad

La violencia en Guerrero y en otras partes de México ha sido un tema recurrente en la agenda de seguridad nacional, y la respuesta del gobierno sigue generando debate. Además de la propuesta de Cortés para tipificar el narcoterrorismo, varios legisladores han planteado la necesidad de revisar la actual estrategia de seguridad y de incorporar cambios significativos.

 

Claudia Sheinbaum, quien está promoviendo una estrategia enfocada en el fortalecimiento de las capacidades de seguridad a nivel local, afirmó que su gobierno no se desviará de su objetivo. “Estamos comprometidos con mejorar la seguridad sin comprometer nuestra soberanía. Creemos que la solución radica en una estrategia robusta desde dentro, sin injerencias extranjeras”, explicó en su conferencia matutina.