En un gesto sin precedentes, las comunidades libanesa y judía de México han hecho un llamado conjunto a la paz en el Medio Oriente, en medio del creciente conflicto entre Israel y los grupos terroristas de Hamás y Hezbolá. Este acto, que fue respaldado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), destaca la importancia de la unidad y la colaboración en tiempos de crisis, reafirmando la vocación pacifista de México en el escenario internacional.
Llamado histórico desde México
Este 14 de octubre de 2024, el secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, sostuvo un encuentro con Daniel Karam, presidente del Centro Libanés, y Elías Achar Levy, presidente del Comité Central de la Comunidad Judía en México, para felicitarlos por su comunicado conjunto. En este mensaje, ambas comunidades expresaron su anhelo de paz en la región y su rechazo a la violencia, poniendo de relieve la necesidad urgente de un cese al fuego y el inicio de negociaciones políticas.
De la Fuente subrayó que este acto es “un ejemplo que reafirma la tradición hospitalaria de un país pacifista que debe trascender nuestras fronteras”. El canciller destacó la relevancia de este tipo de gestos en un mundo polarizado, señalando que México, como hogar de ambas comunidades, tiene el compromiso de promover la paz y la concordia.
Posición de México ante el conflicto
México ha sido consistente en su postura pacifista, y este llamado conjunto refuerza los principios de su política exterior, basados en la no intervención, la solución pacífica de conflictos y el respeto a la soberanía de los pueblos. La SRE reafirmó que “el cese al fuego y el inicio de negociaciones políticas entre los involucrados es el único camino serio y duradero hacia la paz en el Medio Oriente”.
La cancillería mexicana también destacó que la unidad entre las comunidades libanesa y judía en México es una demostración clara de que la concordia y la civilidad son posibles, incluso en un contexto internacional tan complejo y tenso como el del Medio Oriente.
Voces por la paz: Declaraciones de los líderes comunitarios
Durante la reunión, Elías Achar Levy, representante de la comunidad judía, expresó el deseo profundo de su comunidad por la paz en la región: “La comunidad judía de México anhela la paz en el Medio Oriente. Que llegue pronto la paz, que no haya más víctimas”. Achar enfatizó la importancia de detener la violencia y trabajar en soluciones diplomáticas que eviten más sufrimiento a las poblaciones civiles.
Por su parte, Daniel Karam, presidente del Centro Libanés, subrayó la esperanza de que este llamado a la paz tenga eco a nivel internacional. “Estamos muy esperanzados de que esta iniciativa, inédita en el mundo, tenga eco y pueda replicarse en otras partes del orbe. Lo que estamos diciendo en este comunicado es que se logre la paz inmediata en el Líbano y en Israel”, afirmó.
Ambos líderes coincidieron en que la paz es el único camino viable para evitar más muertes y sufrimiento en una región que ha sido escenario de tensiones durante décadas. Este llamado, nacido desde la comunidad mexicana, busca sensibilizar al mundo y motivar a otros actores a unirse en la búsqueda de la paz.
Legado de colaboración y respeto
Las comunidades libanesa y judía en México han tenido una relación histórica marcada por la cooperación y el respeto mutuo. Llegaron a México hace más de un siglo, huyendo de la persecución y la inestabilidad en sus países de origen. En nuestro país encontraron un hogar donde no solo coexistieron en paz, sino que también contribuyeron significativamente al desarrollo social, cultural y económico de la nación.
En el comunicado conjunto, ambas comunidades recordaron estos lazos: “Los lazos de amistad han prevalecido y se han fortalecido con el paso del tiempo, y especialmente en los últimos años, cuando ambas comunidades han estrechado sus vínculos y participado conjuntamente en proyectos sociales por el bienestar de México”.
Este contexto histórico brinda una base sólida para que, en tiempos de crisis internacional, ambas comunidades se unan nuevamente, esta vez para abogar por la paz en el Medio Oriente. Su mensaje no solo refleja su compromiso con el bienestar de sus respectivas diásporas, sino también con el futuro de sus países de origen y con la estabilidad global.
Papel de la comunidad internacional
El conflicto en el Medio Oriente ha cobrado miles de vidas inocentes y ha desestabilizado la región por décadas. En este escenario, la comunidad internacional juega un papel clave para promover soluciones diplomáticas que pongan fin a la violencia. México, a través de su política exterior pacifista, ha mantenido una postura firme en favor del diálogo y la negociación, y este llamado conjunto de las comunidades libanesa y judía es un ejemplo claro de cómo la sociedad civil puede influir en los esfuerzos de paz.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de su Fuerza Provisional para el Líbano (UNIFIL), ha intentado mantener la estabilidad en la frontera entre Israel y el Líbano, aunque con limitados resultados. En este contexto, la SRE también ha condenado los ataques contra UNIFIL y ha reiterado su llamado urgente a un cese al fuego.
Este llamado conjunto a la paz es un recordatorio de que, aunque el conflicto en el Medio Oriente es complejo, siempre hay espacio para el diálogo y la cooperación. La SRE destacó que “expresiones inéditas y excepcionales como la unidad de voces de las comunidades judía y libanesa revelan con nitidez que la concordia y la civilidad son factibles en ese gran propósito, y por ello México los acompaña y los respalda”.
En un mundo cada vez más polarizado, este acto de unidad es un recordatorio de que la paz es posible cuando se trabaja en conjunto. México se une a este llamado global por la paz, reafirmando su compromiso con los valores de concordia, diálogo y respeto mutuo.
