Más del 60% de las escuelas en el Estado de México enfrentan problemas de infraestructura, una situación que ha sido reconocida por las autoridades educativas de la entidad. El secretario de Educación, Miguel Ángel Hernández Espejel, informó que de las más de 32 mil escuelas en la entidad, la mayoría presenta fallas en áreas como sanitarios, cableado eléctrico, pintura y herrería. Aunque estas condiciones no representan un riesgo inmediato para la comunidad estudiantil y docente, su atención se ha vuelto una prioridad para garantizar instalaciones adecuadas.
El principal problema que enfrentan las escuelas del Estado de México es la falta de mantenimiento a largo plazo, donde muchas de estas instituciones fueron construidas en las décadas de 1960 y 1970, lo que ha provocado que los materiales y las instalaciones comiencen a mostrar signos de deterioro.
Uno de los puntos críticos es el estado de los sanitarios, que requieren reparaciones urgentes en la mayoría de los planteles. Este problema se refleja en la necesidad de un presupuesto mayor para poder abordar de manera paulatina las reparaciones necesarias en los próximos años.
En este sentido, el secretario Hernández Espejel ha solicitado un incremento presupuestal del 10 al 20% para el año 2025, con el objetivo de destinar más recursos a la rehabilitación de los espacios educativos. La propuesta busca acelerar la atención de las problemáticas que enfrentan las escuelas, muchas de las cuales dependen en gran medida del apoyo de los padres de familia para evitar que la infraestructura se deteriore aún más.
Inversión actual y metas a futuro
Durante este año, solo alrededor de 600 planteles de los más de 32 mil que existen en el Estado de México han recibido algún tipo de mantenimiento o rehabilitación. Esta cifra refleja la necesidad urgente de un aumento en los recursos destinados al sector educativo, ya que el ritmo actual de reparación es insuficiente para atender las demandas de infraestructura de una red escolar tan extensa.
El objetivo del gobierno estatal es lograr que un mayor número de escuelas reciba atención oportuna en los próximos años, para evitar que las condiciones de deterioro continúen afectando el ambiente de aprendizaje de miles de estudiantes. “Nuestra prioridad son los sanitarios, ya que el estado de estos afecta directamente el bienestar y la salud de los alumnos”, explicó el secretario. Este enfoque busca mejorar áreas críticas que impactan directamente la calidad de vida en las escuelas.
El gobierno estatal ha manifestado su compromiso con mejorar la infraestructura educativa a través de acciones concretas que permitan una rehabilitación progresiva de los planteles escolares. Una de las principales estrategias es la colaboración con los padres de familia, quienes han jugado un papel fundamental en el mantenimiento de las instalaciones a lo largo de los años.
Gracias a su apoyo, se ha evitado que la situación empeore en muchos casos, aunque se reconoce que el problema debe ser abordado desde un enfoque institucional con recursos adecuados.
Además, el gobierno está evaluando diferentes propuestas para asegurar que las escuelas no solo reciban mantenimiento correctivo, sino también preventivo, con el fin de evitar futuros deterioros que comprometan la funcionalidad de las instalaciones.