Ciudad de México. La Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, reafirmó su compromiso de mantener la paz y el respeto a los derechos humanos durante los seis años de su mandato, asegurando que el país “seguirá viviendo tiempos de hazañas pacíficas”. En una ceremonia inédita en el Campo Marte, donde recibió honores plenos a su investidura como Comandanta Suprema de las Fuerzas Armadas, Sheinbaum subrayó el papel crucial de estas instituciones en el fortalecimiento de la paz y la seguridad en México.
En su discurso, la mandataria expresó: “Por el profundo respeto que les tengo, nunca emitiré orden alguna que vulnere el orden constitucional o los derechos humanos del pueblo de México”, destacando su compromiso con la legalidad y el Estado de derecho.
Ceremonia histórica en Campo Marte
La ceremonia marcó un hecho sin precedentes en la historia del país. Sheinbaum, como la primera mujer en asumir la presidencia de México, fue recibida con firme lealtad y profundo respeto por las Fuerzas Armadas, quienes reafirmaron su compromiso con su proyecto de nación. El Secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales, expresó: “Como la primera mujer presidenta, toma usted el timón”. Por su parte, el Secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla, destacó el papel de las mujeres en esta nueva etapa: “Comandanta Suprema de las Fuerzas Armadas… Hecho inédito en nuestro devenir, y motivo por el cual nos encontramos unidos para la salutación cuando se asume el mando de tropas”.
Sheinbaum recorrió en una Humvee, flanqueada por los titulares de la Sedena y la Marina, las filas del Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea Mexicana y la Guardia Nacional. Además del saludo de los generales y almirantes, la presidenta recibió el respeto de las mujeres de las Fuerzas Armadas, incluida la general brigadier Mariana de La Cruz Sánchez, así como de tenientes coroneles, capitanas, soldadas y contralmirantes.
Guardia Nacional y defensa de los derechos humanos
En respuesta a las críticas sobre la militarización del país debido al traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, Sheinbaum aseguró: “Es totalmente falso. En nuestro país no hay estado de excepción ni violaciones a los derechos humanos. Lo que hay es más democracia, más libertades y Estado de derecho”. La presidenta recordó que su mandato, como civil elegida por voto popular, refuerza la tradición civilista de las Fuerzas Armadas mexicanas.
Sheinbaum también subrayó el origen popular de estas instituciones, vinculadas a la Revolución Mexicana y la defensa de la justicia social. “Esto no solo es un orgullo, sino una fortuna para nuestro país”, afirmó.
Apoyo patriótico en la Cuarta Transformación
En el marco de la Cuarta Transformación, la presidenta destacó que las Fuerzas Armadas seguirán acompañando al pueblo de México en sus tareas fundamentales, como la defensa de la soberanía y la seguridad pública, además de auxiliar a la población civil en situaciones de desastre. Asimismo, convocó a los elementos de las Fuerzas Armadas a continuar apoyando en proyectos estratégicos, como la construcción de trenes de pasajeros y puertos.
Finalmente, Sheinbaum anunció que se encuentra en el Congreso de la Unión una reforma para equiparar el salario mínimo de maestros, médicos, enfermeras, soldados, marinos y efectivos de la Guardia Nacional con el salario promedio del Instituto Mexicano del Seguro Social, en un esfuerzo por mejorar las condiciones laborales de estos servidores públicos.
La ceremonia concluyó con salvas en honor a la presidenta y un saludo militar, que simbolizó “la más grande muestra de respeto y lealtad” de las Fuerzas Armadas hacia la primera mujer en ocupar la presidencia de México.
