22 noviembre, 2024

 

La vicepresidenta y candidata presidencial demócrata, Kamala Harris, visitó la comunidad fronteriza de Douglas, Arizona, donde se comprometió a trabajar junto a republicanos e independientes para mejorar la seguridad en la frontera con México y reformar el “roto sistema migratorio” de Estados Unidos. En medio de las críticas por la gestión migratoria del gobierno de Joe Biden, Harris tiene el reto de conquistar a votantes preocupados por los cruces ilegales récord y la falta de una reforma migratoria prometida.

 

Harris destacó que, de ser electa, impulsará sanciones más severas para quienes crucen ilegalmente la frontera, pero también promoverá una vía legal para que los migrantes que han vivido en el país durante años puedan obtener la ciudadanía. Aseguró que este enfoque garantizará una frontera segura y un sistema migratorio más humano, rechazando la idea de que ambos objetivos son mutuamente excluyentes.

 

 

Durante su visita a Arizona, Harris recorrió una parte del muro fronterizo y conversó con agentes de la patrulla fronteriza, quienes han señalado la falta de recursos como uno de los principales problemas. Harris calificó esta situación de “inaceptable” y prometió aumentar la tecnología, el personal y los recursos para combatir el tráfico de fentanilo, una crisis de salud pública que ha golpeado a Estados Unidos.

 

La candidata demócrata también criticó a Donald Trump, señalando que su enfoque antiinmigración ha empeorado los desafíos en la frontera y alimentado el miedo y la división. Harris afirmó que, bajo su liderazgo, el país puede alcanzar una solución migratoria que mantenga la seguridad y honre los valores de una nación de inmigrantes.