28 septiembre, 2024

 

La Cámara de Diputados aprobó  con 473 votos a favor, el dictamen que eleva a rango constitucional el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, parte del “Plan C” impulsado por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Esta medida representa un paso importante para consolidar las políticas sociales de la actual administración.

 

El programa, que ha sido clave en el apoyo a los jóvenes en situación de desempleo, tiene como objetivo principal integrarlos al mercado laboral y alejarlos de conductas delictivas. Ricardo Monreal, líder de la bancada de Morena en San Lázaro, destacó la relevancia de la reforma, calificándola como una medida “nunca antes vista”. Según Monreal, el programa ya representa una inversión cercana a 1 billón de pesos anuales, lo que refleja el impacto social y económico que ha tenido desde su creación.

 

“Es una reforma trascendental que no solo capacita a los jóvenes, sino que los integra en el proceso productivo del país”, afirmó Monreal. Además, enfatizó que este esfuerzo es parte del legado del presidente López Obrador, un compromiso que continuará bajo el liderazgo de Claudia Sheinbaum.

 

 

Antes de la votación, la diputada de Movimiento Ciudadano, Amancay González Franco, resaltó que el dictamen podría cambiar la vida de miles de jóvenes. Consideró que esta reforma responde a una deuda histórica con quienes no han tenido oportunidades de capacitarse o emprender. Por su parte, Luis Enrique García López, del PAN, calificó la medida como un acto de justicia, destacando que la inclusión de los jóvenes en el desarrollo económico es un avance significativo para el país.

 

El dictamen ahora se turnará al Senado para su discusión y eventual aprobación. Se espera que en los próximos días la Cámara de Diputados emita la declaratoria de reforma constitucional para su envío al Ejecutivo. Una vez promulgada, la reforma quedará establecida en el artículo 123 de la Constitución.

 

La reforma estipula que el Estado otorgará un apoyo económico mensual equivalente al menos a un salario mínimo a jóvenes de entre 18 y 29 años que estén desempleados y no cursen estudios formales. El objetivo es capacitarlos en diversas unidades económicas durante un periodo de hasta 12 meses. Esta medida pretende mejorar las oportunidades laborales y reducir las brechas de desigualdad en el país.