El proceso de reforma al Poder Judicial en México continua entre la controversia legal. Ahora dos jueces federales emitieron fallos que frenan temporalmente la aplicación de la reforma judicial promovida por el Congreso de la Unión, a lo que se suman las protestas de trabajadores del Poder Judicial, quienes han bloqueado la autopista México-Cuernavaca en una manifestación denominada “Procesión por la justicia”, en la que se pronunciaron en contra de la enmienda constitucional que busca modificar la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular.
Suspensiones judiciales contra la reforma
La jueza Nancy Juárez Salas, titular del Juzgado Decimonoveno de Distrito en Coatzacoalcos, Veracruz, emitió una resolución que ordena retirar indefinidamente la publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) del dictamen aprobado por el Congreso de la Unión el pasado 15 de septiembre. Juárez Salas argumentó que durante el proceso legislativo se cometieron varias irregularidades, entre ellas, no haber discutido ni aprobado la iniciativa en el plazo de 30 días naturales, como lo establece el artículo 136 de la Ley Orgánica del Congreso.
La jueza citó que el proyecto de reforma no fue presentado como una iniciativa de condición preferente, lo que habría obligado al Congreso a someterlo a discusión y votación dentro del plazo estipulado.
Por otro lado, el juez Francisco Javier García Contreras, del Segundo Distrito en el Estado de Colima, concedió una suspensión provisional que detiene la implementación de la reforma judicial. Este fallo ordena al Instituto Nacional Electoral (INE), al Consejo de la Judicatura Federal (CJF), al Senado, a la Cámara de Diputados y a los congresos estatales que se abstengan de aplicar la reforma. Además, se impide al INE iniciar cualquier proceso relacionado con la organización y desarrollo del Proceso Electoral Extraordinario 2024-2025, uno de los pilares del plan de reforma judicial.
El juez García Contreras también señaló que el CJF deberá abstenerse de implementar cualquier plan de trabajo para la transferencia de recursos materiales y humanos al Tribunal de Disciplina Judicial, una nueva entidad que se proponía en la reforma.
Bloqueos en la autopista México-Cuernavaca
La resistencia a la reforma no se limitó a los tribunales, trabajadores del Poder Judicial realizaron una manifestación pacífica que culminó con el bloqueo de la autopista México-Cuernavaca por casi dos horas. La marcha comenzó en el kilómetro 80, a la altura de la Paloma de la Paz, y avanzó lentamente hasta la zona de Galerías, en el kilómetro 86.
Manuel Alejandro Peñafiel Salazar, vocero de los trabajadores del Poder Judicial, explicó que la movilización fue organizada como parte de su rechazo a la enmienda constitucional. “Nos mantenemos en pie de lucha, tanto en el ámbito legal como en la calle. No permitiremos que esta reforma avance, ya que amenaza con politizar al Poder Judicial mediante la elección de jueces, magistrados y ministros por voto popular”, declaró Peñafiel.
La marcha se incorporó al plantón que los trabajadores mantienen desde hace días afuera de la sede del Poder Judicial, donde permanecerán hasta el próximo 1 de octubre, fecha en la que Claudia Sheinbaum tomará posesión como presidenta de México.
Impacto de la protesta
El bloqueo en la autopista México-Cuernavaca afectó a decenas de automovilistas, quienes se vieron obligados a desviarse sin éxito, ya que el contingente de manifestantes, compuesto por alrededor de 50 personas, ocupaba la totalidad de los carriles en dirección norte-sur. La protesta se desarrolló de manera pacífica, aunque generó una importante congestión vehicular en la zona.
La demanda de los manifestantes es clara: rechazan la reforma que introduce la elección de jueces y magistrados a través del voto popular, argumentando que esta medida debilitaría la independencia del Poder Judicial y lo sometería a intereses políticos. En su discurso, Peñafiel mencionó que las decisiones judiciales deben ser técnicas y estar basadas en la ley, no en la popularidad o conveniencia política.
Un contexto de tensiones
El proceso de reforma al Poder Judicial ha generado tensiones desde su propuesta inicial. La reforma fue aprobada por el Congreso el pasado 15 de septiembre, con el respaldo mayoritario de Morena y sus aliados, quienes argumentan que el cambio es necesario para democratizar y hacer más accesible el sistema judicial. Sin embargo, los detractores consideran que este movimiento pone en peligro la independencia del Poder Judicial y podría convertir a los jueces en figuras vulnerables a la presión política.
Entre los aspectos más polémicos de la reforma se encuentra la propuesta de que jueces, magistrados y ministros sean electos por voto popular, un cambio que no tiene precedentes en el país. Quienes se oponen a esta medida argumentan que la independencia judicial es un pilar fundamental del Estado de derecho, y que someter a los jueces a la voluntad del electorado podría socavar su capacidad para tomar decisiones imparciales.
Reacciones políticas
Las suspensiones judiciales y las protestas han generado diversas reacciones en el ámbito político. Desde Morena, el senador Ricardo Monreal lamentó la intervención judicial y afirmó que el Poder Legislativo tiene la facultad de reformar la Constitución, lo que calificó como un ejercicio legítimo de soberanía. Monreal destacó que el objetivo de la reforma es hacer el sistema judicial más accesible y transparente.
Por otro lado, el Partido Acción Nacional (PAN) celebró las suspensiones judiciales como una victoria para la democracia y la independencia del Poder Judicial. Marko Cortés, presidente del PAN, declaró que esta reforma representa un riesgo para el sistema judicial mexicano, y que la oposición seguirá luchando para evitar que los jueces sean elegidos por voto popular.
La suspensión provisional otorgada por los jueces Juárez Salas y García Contreras no significa el fin de la reforma, pero sí representa un importante obstáculo para su implementación. El 30 de septiembre se celebrará la audiencia incidental que determinará si la suspensión se convierte en definitiva o si la reforma puede seguir adelante.
Mientras tanto, los trabajadores del Poder Judicial mantienen su plantón y no descartan nuevas movilizaciones en los próximos días. El clima de incertidumbre sigue prevaleciendo en torno a la reforma judicial, y todo indica que la batalla legal y política aún tiene varios capítulos por delante.
La reforma al Poder Judicial en México enfrenta nuevamente un revés, tanto en el ámbito legal como en las calles. Con la suspensión provisional emitida por dos jueces federales y las protestas en la autopista México-Cuernavaca, el futuro de la reforma es incierto. Lo que es claro es que la resistencia a esta iniciativa sigue creciendo, y el debate sobre la independencia judicial y la elección de jueces continuará siendo un tema central en la agenda política del país en los próximos meses.
