Uno de los casos más emblemáticos es el inmueble ubicado en Pedro Antonio de los Santos 50, en la colonia San Miguel Chapultepec, que fue entregado en julio de este año. Sin embargo, solo dos familias han podido ocupar sus departamentos debido a los numerosos problemas en las áreas comunes. Ana Delia Escárcega, una de las damnificadas, detalló que el edificio presenta filtraciones de agua, problemas con el drenaje y pisos desnivelados. Además, las alcantarillas son insuficientes para drenar el agua de lluvia, lo que ha provocado inundaciones en el estacionamiento.
Escárcega también explicó que el edificio fue entregado sin acabados básicos. “Nos lo entregaron con el suelo pelón, sin puertas en los cuartos, sin closets ni cocina integral,” comentó, y agregó que los costos de nivelación y acabados han recaído en los damnificados, quienes deben asumir estos gastos adicionales.
En respuesta, la Comisión para la Reconstrucción aseguró que se están llevando a cabo las ejecuciones técnicas necesarias para corregir los desperfectos. No obstante, decidieron entregar los departamentos para “no generar más espera”, una medida que no ha tranquilizado a los afectados, quienes siguen enfrentando condiciones inadecuadas.
En otro caso, el predio de Pitágoras 316, en la colonia Narvarte Poniente de la alcaldía Benito Juárez, muestra un avance preocupantemente lento. Dalia Martínez, miembro del Movimiento Damnificados 19S, informó que la construcción apenas ha avanzado hasta los cimientos, y a este ritmo —con solo dos niveles construidos cada 11 meses—, tomaría hasta 12 años completar los 14 niveles requeridos.
A pesar de múltiples reuniones y manifestaciones, los damnificados no han recibido una fecha clara para la entrega del edificio. Martínez lamenta que llevan dos años esperando el Proyecto Ejecutivo, sin respuesta. Además, destacó que algunos vecinos, especialmente adultos mayores, no vivieron para ver sus hogares reconstruidos.
Con la reciente llegada de Clara Brugada como nueva jefa de Gobierno de la Ciudad de México, los damnificados esperan que por fin se dé una solución definitiva a estos problemas que persisten desde hace años.
