22 noviembre, 2024

 

En la comunidad de Ojital Viejo, ubicada en el municipio de Papantla, Veracruz, un derrame de hidrocarburo ha contaminado más de 10 kilómetros de un arroyo que desemboca en Troncones, Coatzintla. El incidente, atribuido a la falta de mantenimiento en la red de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), ha causado graves daños ambientales y afectado profundamente la vida de los habitantes de la zona, en su mayoría indígenas totonacos.

 

 

Desde el 21 de agosto, fecha en que ocurrió la fuga inicial, los efectos han sido devastadores. La contaminación ha afectado las cosechas, matado a muchas especies acuáticas y dejado a los animales domésticos intoxicados tras entrar en contacto con el agua contaminada. El arroyo, que solía ser un lugar de recreo y sustento para los pobladores, se ha convertido en un afluente lleno de petróleo.

 

A pesar de la gravedad de la situación, los residentes se quejan de la escasa respuesta de Pemex y las autoridades. Hasta ahora, sólo se ha enviado un equipo de 10 personas con palas para intentar contener el derrame, una tarea que, según los habitantes, es insuficiente. “Necesitamos más voluntarios, estudiantes, biólogos y profesionales que puedan ayudarnos a rescatar la fauna afectada y mitigar el daño”, expresó Omar Lázaro, uno de los afectados.

 

 

La comunidad ha bloqueado la carretera federal en protesta, exigiendo que Pemex asuma su responsabilidad y envíe un equipo adecuado para frenar el daño ambiental. Sin embargo, las acciones han sido limitadas y no se ha brindado una solución concreta.

 

 

Ojital Viejo, una comunidad que depende de la agricultura y la venta de artesanías en la zona arqueológica de El Tajín, ha visto afectada su economía y su forma de vida. Los habitantes piden una evaluación integral de los daños y medidas urgentes para restaurar el medio ambiente, temiendo que las consecuencias del derrame sean irreversibles.

 

 

El derrame también ha impactado a otras comunidades cercanas, como El Chote y El Naranjal, que han sufrido similares incidentes debido a fugas en los ductos de Pemex. La situación sigue siendo crítica, y los habitantes exigen una respuesta inmediata.