19 septiembre, 2024

 

El 9 de septiembre de 2024, la violencia regresó con fuerza a las calles de Culiacán, Sinaloa. Un enfrentamiento entre dos facciones del Cártel de Sinaloa, conocido como Los Mayos y Los Chapitos, ha desencadenado una nueva ola de violencia que mantiene en vilo a la población. Los enfrentamientos armados, que han causado la muerte de un militar y un civil, han llevado a la suspensión de actividades escolares y del transporte público en algunas zonas del municipio.

 

Este conflicto, que enfrenta a los seguidores de Ismael “El Mayo” Zambada y los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, conocido como Los Chapitos, es parte de una disputa territorial por el control del cártel en Sinaloa. El detonante parece haber sido la reciente detención de “El Mayo” en Estados Unidos, un hecho que ha sacudido las dinámicas internas del crimen organizado en la región.

 

Detención de “El Mayo” y el inicio de la guerra

El enfrentamiento entre Los Mayos y Los Chapitos no es un conflicto nuevo, pero la reciente captura de Ismael Zambada ha exacerbado las tensiones. Tras la detención de “El Mayo”, su facción ha quedado en manos de su hijo, Ismael Zambada Sicairos, alias “Mayito Flaco”, quien ha decidido lanzar una ofensiva contra los hijos de “El Chapo” Guzmán, liderados por Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar.

 

De acuerdo con informes preliminares, el conflicto se ha recrudecido en los últimos días debido a la detención de “El Mayo” en Texas. Las teorías sobre su captura varían; algunas fuentes indican que fue resultado de un engaño orquestado por Joaquín Guzmán López, otro de los hijos de “El Chapo”. Según esta versión, “El Mayo” fue atraído a una reunión en Culiacán con el gobernador Rubén Rocha Moya y el exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Héctor Melesio Cuén, quien fue asesinado ese mismo día.

 

A pesar de los rumores, lo único claro es que tanto “El Mayo” como Guzmán López fueron detenidos en Nuevo México y trasladados a Texas, lo que dejó un vacío de poder en la facción de Los Mayos, ahora liderada por su hijo, quien ha decidido intensificar la lucha contra Los Chapitos.

 

Mensaje de guerra de Los Mayos

En redes sociales y a través de audios difundidos por plataformas como Borderland Beat, se ha confirmado que los sicarios de “Mayito Flaco” han lanzado una ofensiva directa contra Los Chapitos. En uno de los audios, un supuesto operador de Los Mayos afirma que “el gobierno está de su lado” y que la guerra es exclusivamente contra Los Chapitos, no contra las autoridades.

 

“Con el gobierno no vamos a pelear. El gobierno está de nuestro lado,” se escucha en el mensaje. Este audio ha generado preocupación entre los habitantes de Culiacán, quienes temen que la violencia continúe escalando y que las fuerzas del Estado puedan verse involucradas en el conflicto.

 

Uno de los principales operadores de la facción de “El Mayo” que ha sido señalado como responsable de liderar esta ofensiva es un individuo apodado “El Comanche”, identificado como jefe de seguridad de Mayito Flaco. A él se han sumado otros operadores criminales importantes, como Juan José Ponce Félix, alias “El Ruso”, y Fausto Isidro Meza Flores, conocido como “Chapo Isidro”. Todos ellos parecen estar alineados en el objetivo de derrotar a Los Chapitos y consolidar el control de Culiacán y otras zonas estratégicas de Sinaloa.

 

Reacciones del gobierno y AMLO

Ante la creciente violencia, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue cuestionado sobre si los enfrentamientos en Culiacán están relacionados con la captura de “El Mayo” Zambada. Durante su conferencia de prensa matutina, AMLO no descartó esta posibilidad, afirmando que “es muy posible que esté vinculado a eso”.

 

López Obrador añadió que “hasta el mismo señor Zambada escribió que no era conveniente la violencia o algo por el estilo”, lo que sugiere que la captura de “El Mayo” ha generado un reacomodo de fuerzas dentro del cártel. El mandatario también subrayó que el gobierno federal está trabajando para mantener la seguridad en Sinaloa y que no se permitirá que el crimen organizado domine la región.

 

Por su parte, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, también se pronunció sobre la situación, admitiendo que “hay hechos de violencia en algunos lugares de Elota y Culiacán, pero son focalizados”. Rocha Moya explicó que las autoridades locales están en alerta y que se ha desplegado un protocolo de seguridad en colaboración con las fuerzas armadas y equipos aéreos para proteger a la población civil.

 

 

Nuevos enfrentamientos y la incertidumbre en Sinaloa

A pesar de las medidas de seguridad implementadas, la violencia continúa. La mañana del 11 de septiembre, se reportó un nuevo enfrentamiento entre grupos armados en la comunidad de Quilá, cerca de la maxipista Culiacán-Mazatlán. Las fuerzas de seguridad confirmaron la presencia de civiles armados que circulaban en camionetas artilladas y bloqueaban las carreteras con vehículos de carga para evitar el acceso de rivales.

 

En videos que circulan en redes sociales, se puede observar cómo los civiles armados patrullan las calles de Culiacán y otras comunidades cercanas, como Jacola, La Laguna de Canachi y Estación Obispo, sembrando el miedo entre los habitantes. Hasta el momento, no se han reportado heridos en estos enfrentamientos, pero la situación sigue siendo tensa.

 

El gobernador Rocha Moya advirtió que es probable que los enfrentamientos continúen, ya que los grupos armados parecen estar decididos a ganar el control territorial a toda costa. Sin embargo, también señaló que las fuerzas militares y de seguridad están trabajando en coordinación para dispersar a los grupos delictivos y garantizar la seguridad de la población.

 

Impacto en la vida cotidiana

La guerra entre Los Mayos y Los Chapitos ha alterado la vida cotidiana en Culiacán y sus alrededores. La suspensión de actividades escolares y del transporte público ha afectado a miles de personas que dependen de estos servicios. Las familias viven con miedo de quedar atrapadas en medio de un tiroteo o de que la violencia se desborde en sus barrios.

 

Además, la incertidumbre sobre el futuro de este conflicto ha generado preocupación no solo entre los habitantes de Sinaloa, sino también entre las autoridades federales y locales. La violencia entre facciones del crimen organizado es un recordatorio de que, a pesar de los esfuerzos del gobierno por contener al narcotráfico, las disputas internas en los cárteles continúan siendo una fuente de inestabilidad en el país.

 

La detención de “El Mayo” Zambada ha dejado un vacío de poder que ha sido aprovechado por su hijo, “Mayito Flaco”, para intentar consolidar su control sobre el cártel. Sin embargo, la facción de Los Chapitos, liderada por los hijos de “El Chapo” Guzmán, no parece dispuesta a ceder terreno, lo que augura una escalada de violencia en los próximos días.