Ante la preocupación creciente de los vecinos de la colonia Praderas de San Mateo, en Naucalpan, Estado de México (Edomex), por los constantes microsismos y estruendos que han experimentado en las últimas semanas, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) de la UNAM se ha unido a los esfuerzos para identificar el origen de estos fenómenos.
La colaboración entre el Gobierno del Estado de México, autoridades municipales y especialistas de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, se ha intensificado para abordar la situación con precisión y transparencia.
Durante una reunión celebrada en las oficinas del gobierno de Naucalpan, se acordó la instalación de una estación sismológica provisional en la FES Acatlán. Arturo Iglesias Mendoza, jefe del SSN del Instituto de Geofísica de la UNAM, anunció que esta estación contará con telemetría, lo que permitirá obtener datos más precisos sobre los movimientos del subsuelo en la zona afectada. Esta medida es fundamental para determinar con exactitud las características y posibles causas de los microsismos que inquietan a la comunidad.
Paralelamente, el coordinador municipal de Protección Civil y Bomberos, Moisés Minquini Matilde, informó que se están conformando brigadas comunitarias para preparar a los vecinos en caso de un sismo de mayor magnitud. Asimismo, se está gestionando con el gobierno estatal la instalación de un sistema de alerta sísmica en Praderas de San Mateo, una medida que busca mitigar los riesgos y proteger a los residentes.
Por su parte, el director general de Gobierno de Naucalpan, Sergio Mancilla Zayas, hizo un llamado a la población para que se mantenga atenta a la información oficial emitida por las autoridades locales y los especialistas de la UNAM. Subrayó la importancia de evitar alarmas innecesarias y confiar únicamente en las fuentes oficiales para mantenerse informados sobre los avances en la investigación.
En cuanto a las causas de estos fenómenos, Fernando Mancillas Becerra, de la Secretaría General de Gobierno del Estado de México, afirmó que la coordinación entre las instancias municipales, estatales y la UNAM continuará hasta identificar el origen de los microsismos. Se ha descartado la hipótesis de que estos movimientos sean causados por explosivos utilizados en obras cercanas, sugiriendo que tienen un origen natural.
José María Chávez Aguirre, geólogo de la FES Acatlán, descartó la relación directa con la falla de Acambay, ubicada a 80 kilómetros de Naucalpan, y sugirió centrarse en el análisis de fallas geológicas más cercanas al municipio. Carlos Arce León, especialista en estructuras y sismología de la FES Acatlán, enfatizó que se trabaja tanto en la investigación como en la prevención para reducir los riesgos a la población.
Estos esfuerzos conjuntos buscan brindar seguridad y tranquilidad a los habitantes de Naucalpan, asegurando que se tomen las medidas necesarias para comprender y enfrentar los microsismos que afectan la región.