La gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez, ha confirmado que su gabinete se trasladará a la zona oriente de la entidad para enfrentar de manera directa las emergencias provocadas por las recientes tormentas, que han dejado alrededor de 600 viviendas inundadas en los municipios de Chalco, Valle de Chalco y Nezahualcóyotl.
La gobernadora subrayó la necesidad urgente de atender estas áreas y destacó que la situación requiere un esfuerzo coordinado. “Chalco, Valle de Chalco y Nezahualcóyotl nos necesitan”, expresó la mandataria. En este sentido, anunció que todos los secretarios del gabinete participarán en una reunión especial y se desplazarán a estas localidades para brindar apoyo y coordinar las acciones necesarias.
La gobernadora reconoció el esfuerzo de los integrantes de la mesa de coordinación por la paz, quienes no solo han estado enfrentando problemas de violencia y seguridad, sino que también han estado activos en la gestión de emergencias.
“Agradezco la atención que le están dando al municipio de Chalco. Además de mi compromiso de apoyo, es vital que estemos presentes en el terreno”, señaló Gómez.
El secretario de Gobierno, Horacio Duarte, informó que se ha solicitado apoyo al gobierno federal, que ya ha enviado dos plantas potabilizadoras y camiones vactor para extraer el agua acumulada, pero las medidas actuales no han sido suficientes, por lo que se evaluará una solución técnica para abordar la inundación en las dos colonias más afectadas de Chalco.
Por su parte, Germán Santoyo, titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), indicó en redes sociales que se están llevando a cabo trabajos conjuntos con la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) y los Organismos Descentralizados de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (ODAPAS) para limpiar el drenaje de Chalco. Estos esfuerzos están dirigidos a desazolvar las tuberías que han sido obstruidas por basura y residuos, lo que ha agravado la situación de las inundaciones.
La intervención del gobierno estatal y federal en la zona oriente del Edomex, refleja un enfoque integral para resolver la crisis, garantizando que se atiendan tanto las necesidades inmediatas de los afectados como la restauración a largo plazo de los servicios básicos en las áreas afectadas.
