Después de protestas por parte de ejidatarios de Teyahualco, Estado de México, e impedir el avance en los trabajos de ampliación del Tren Suburbano hacia Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), por incumplimientos de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) para subsanar afectaciones derivadas de las obras; ha iniciado la rehabilitación de avenidas dañadas y con ello, los vecinos observan con optimismo cómo se materializan las promesas de mejora.
Desde el inicio de las obras de ampliación del Tren Suburbano, los vecinos enfrentaron serios inconvenientes, como: viviendas dañadas, vialidades se vieron gravemente afectadas y muchos comerciantes reportaron una disminución significativa en sus ventas.
Jonathan García, habitante del ejido de Teyahualco, compartió su perspectiva sobre los avances recientes: “Ahí van poco a poco, pero sí están cumpliendo, ya están habilitando avenidas. En la semana que viene o la otra ya empiezan a pavimentar la avenida Potrero y en avenida Recursos Hidráulicos, ya rehabilitaron un paso y en la Doctores también. Falta el apoyo a comerciantes y ya iremos viendo de qué manera avanza todo.”
El compromiso de las autoridades federales para solucionar los problemas surgidos durante las obras es evidente. Las autoridades del gobierno han comenzado a cumplir con los acuerdos establecidos, lo que ha generado un ambiente de esperanza en la comunidad, pero algunos desafíos persisten. Los vecinos y comerciantes todavía esperan que se resuelvan asuntos relacionados con la reparación de viviendas dañadas y la recuperación de ventas perdidas.
A pesar de los avances en la rehabilitación de las avenidas, la situación no se resuelve de inmediato. García mencionó que, para el 30 de agosto, los trabajos prioritarios estarán en marcha, aunque no se espera su conclusión completa en ese plazo. “Entendemos que esto es un proceso, no será de la noche a la mañana”, comentó.
Los comerciantes también están a la espera de que se realice un censo para evaluar las pérdidas en ventas y buscar compensaciones adecuadas. El proceso de restauración y compensación es crucial para asegurar que los afectados puedan volver a la normalidad y que la comunidad en general pueda beneficiarse de las mejoras en la infraestructura.
Mientras tanto, los residentes y comerciantes de Teyahualco siguen atentos a los desarrollos de la obra, con la esperanza de que se continúe avanzando conforme a lo prometido y que se resuelvan los problemas que aún persisten. La colaboración entre las autoridades y la comunidad será clave para lograr un resultado exitoso en esta importante ampliación de transporte.