En un paso decisivo hacia la regulación de productos que han generado debate en todo el mundo, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó, con 34 votos a favor, dos en contra y cero abstenciones, una medida que busca prohibir toda actividad relacionada con los cigarrillos electrónicos, vapeadores y dispositivos análogos. Esta decisión, tomada en el Palacio Legislativo de San Lázaro, marca un punto clave en el esfuerzo por controlar el uso de estos productos en México.
La iniciativa, que también incluye la prohibición de sustancias tóxicas y el uso ilícito del fentanilo, ha generado reacciones diversas entre los legisladores. Los diputados de Morena y sus aliados defendieron la medida como una acción necesaria para proteger la salud pública, pero la propuesta no estuvo exenta de críticas.
Durante la sesión, la diputada Cynthia López Castro, del PRI, expresó su apoyo al dictamen pero cuestionó la inclusión de esta prohibición en la Constitución. “Me parece desatinado poner eso en la Constitución, creo que la Constitución no es para poner eso, porque entonces por qué no se prohíbe el tabaco, por qué no se prohíbe el alcohol o por qué no se prohíben las drogas”, argumentó.
López Castro también destacó la necesidad de regular estos productos en lugar de prohibirlos completamente. “Se tiene que regular el tema de los vapeadores, porque si no lo único que se va a hacer es abrirle la puerta al mercado negro”, señaló, refiriéndose a los posibles efectos adversos que podría tener una prohibición total sin un marco regulatorio adecuado.
El debate en torno a los vapeadores y cigarrillos electrónicos ha sido intenso en los últimos años, con estudios que señalan tanto riesgos como beneficios potenciales. Los defensores de la prohibición argumentan que estos dispositivos, especialmente entre los jóvenes, han aumentado los riesgos de adicción a la nicotina y otros problemas de salud. Por otro lado, algunos expertos en salud pública sugieren que una regulación estricta podría ser una alternativa más efectiva que la prohibición absoluta.
La medida aprobada en comisiones aún debe pasar por el pleno de la Cámara de Diputados para su aprobación final. De ser ratificada, México se uniría a una lista creciente de países que han tomado medidas drásticas contra los cigarrillos electrónicos y vapeadores.
