19 septiembre, 2024

La carretera federal 55 en el municipio de Tenancingo, Estado de México, enfrenta un cierre total tras la aparición de grietas y hundimientos provocados por intensas lluvias. Un estruendo alarmante alertó a los vecinos del Paraje Plan de San Martín sobre el colapso en el kilómetro 38+500, la situación ha empeorado desde entonces, lo que llevó a las autoridades locales y a la Guardia Nacional a cerrar la vía para prevenir daños adicionales.

 

Según el alcalde Héctor Gordillo Sánchez, la ruptura del pavimento comenzó el día anterior y ha revelado al menos cuatro hundimientos adicionales a lo largo de la carretera. “Estamos solicitando una declaratoria de emergencia al gobierno federal para atender la gravedad de la situación”, declaró el alcalde tras inspeccionar el área.

 

La interrupción del tráfico ha complicado el acceso al municipio, especialmente para el transporte pesado, que debe desviarse hacia la autopista de cuota que conecta con Tenango del Valle e Ixtapan de la Sal. El transporte menor, con un límite de hasta 3.5 toneladas, puede utilizar una ruta alterna por El Capulín, que se conecta con Malinalco y San José Tenería, o bien desviarse hasta Joquicingo.

 

El alcalde también señaló que la carretera federal 55 es una arteria crucial para los habitantes de la región, y el cierre está teniendo un impacto económico significativo. “Es la única carretera directa hacia la región, y su cierre está obligando a los automovilistas a invertir dos horas adicionales en su viaje. Esto también ha incrementado los costos de transporte colectivo debido a los peajes adicionales”, explicó Gordillo Sánchez.

 

 

La Junta Local de Caminos del gobierno mexiquense está colaborando con la Guardia Nacional en la supervisión de la situación. No obstante, la carretera es de jurisdicción federal, y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) es la encargada de realizar el diagnóstico y coordinar la rehabilitación. Las autoridades sugieren utilizar la autopista Tenango-Ixtapan de la Sal o la carretera libre Tenango-Malinalco como rutas alternas.

 

La situación se agrava con el paso de las lluvias, que han prolongado el daño en la carpeta asfáltica. Para los residentes, especialmente floricultores y productores agrícolas que dependen de esta ruta para llegar a la Central de Abasto en Toluca y la Ciudad de México, la pronta reparación es crucial. La comunidad espera una respuesta rápida y eficaz para restablecer la normalidad en el acceso a su región.