En un importante avance para la protección de la propiedad intelectual y el patrimonio cultural de México, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) ha otorgado la designación de “Indicación Geográfica” a tres emblemáticos productos mexicanos: la Cajeta de Sayula, las Catrinas de Barro de Capula y el Cobre Martillado de Santa Clara del Cobre. Este reconocimiento no solo salvaguarda las tradiciones y técnicas ancestrales, sino que también fortalece la economía local de estas comunidades.
Cajeta de Sayula: Dulzura tradicional protegida
Originaria del municipio de Sayula en Jalisco, la “Cajeta de Sayula” es ahora un producto protegido que sólo puede llevar este nombre si se elabora con leche cruda de vaca, azúcar y vainilla. Esta medida asegura que la autenticidad y la calidad de este dulce tradicional se mantengan, protegiendo así su identidad cultural y garantizando que el producto que llegue a los consumidores sea genuino y de alta calidad.
Catrinas de Barro de Capula: Arte en protección
Las “Catrinas de Barro de Capula” de Michoacán representan otra faceta vital de la artesanía mexicana que ha sido reconocida. Estas figuras, que deben ser moldeadas utilizando barro de la región y siguiendo técnicas específicas, son un símbolo icónico en México, especialmente durante las celebraciones del Día de Muertos. La variedad de vestimentas que pueden exhibir estas catrinas, desde indígenas Purépechas hasta cocineras tradicionales, muestra la rica diversidad cultural del país.
Cobre Martillado de Santa Clara del Cobre: Un Legado de Metal
El “Cobre Martillado de Santa Clara del Cobre” es el tercer producto cuya fabricación debe realizarse exclusivamente en la localidad de Santa Clara del Cobre, en Michoacán. Este material y su técnica de martillado no solo son testigos de la habilidad artesanal de la región, sino que también son un pilar de la economía local. Las técnicas permitidas, como el martillado perdido y el caracol, son parte integral de este legado que ahora recibe protección legal.
Implicaciones de la Indicación Geográfica
La designación de Indicación Geográfica por parte del IMPI, efectiva a partir del 5 de julio de 2024, implica que estos productos tienen características únicas derivadas específicamente de su origen geográfico. Con esto, se busca no solo proteger la propiedad intelectual y las expresiones culturales, sino también apoyar a las comunidades locales en la promoción de sus productos en mercados nacionales e internacionales bajo un marco de autenticidad y calidad garantizada.
Durante la ceremonia de declaración, los representantes de las comunidades afectadas expresaron su agradecimiento y satisfacción por el reconocimiento. Se destacó la importancia de este paso para proteger contra la falsificación y la apropiación indebida de sus tradiciones y productos. “Esto no solo reconoce nuestro trabajo y tradición, sino que también abre puertas para que nuestros productos sean valorados adecuadamente en otros mercados”, comentó un artesano de Santa Clara del Cobre.
La directora del IMPI, en su intervención, subrayó el compromiso del instituto con la protección de los saberes y productos autóctonos de México. “Estas acciones son vitales para la conservación de nuestras riquezas culturales y para asegurar que las generaciones futuras puedan heredar y continuar estas nobles tradiciones”, afirmó.
Con estos nuevos reconocimientos, el IMPI no solo defiende la identidad y la economía local, sino que también impulsa una mayor conciencia sobre la importancia de la protección de la propiedad intelectual. Estas medidas alientan a las comunidades a seguir cultivando y honrando sus tradiciones, asegurando que su legado cultural permanezca protegido y valorado tanto a nivel nacional como global.