En un movimiento que podría afectar la vida laboral de millones de mexicanos, la diputada priista María de Jesús Aguirre Maldonado ha presentado una iniciativa en la Comisión Permanente del Congreso para reformar el artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo. La propuesta busca que el 1 de octubre de cada seis años, día en que se lleva a cabo el cambio de Poder Ejecutivo federal, se convierta en un día de descanso obligatorio para todos los trabajadores.
La legisladora argumenta que esta reforma es necesaria para alinear la Ley Federal del Trabajo con la Constitución, específicamente con el artículo 83, que establece que el Presidente de la República tomará posesión el 1 de octubre y no el 1 de diciembre, como se estipulaba anteriormente. Esta modificación constitucional se deriva de la Reforma Político Electoral de 2014, la cual acordó que el cambio de fecha operaría a partir de la elección de 2024.
Durante su intervención, Aguirre Maldonado explicó que históricamente, el artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo establecía que el 1 de diciembre de cada seis años era un día feriado obligatorio debido a la transmisión del poder al Ejecutivo federal. Sin embargo, con el cambio en la fecha de toma de posesión presidencial al 1 de octubre, es imperativo ajustar la ley laboral para mantener la coherencia legal.
De ser aprobada esta iniciativa, el artículo 74 de la Ley Federal del Trabajo quedaría modificado para incluir el 1 de octubre como día de descanso obligatorio cada seis años, coincidiendo con la transmisión del Poder Ejecutivo Federal. Así, los días de descanso obligatorio serían: el 1 de enero, el primer lunes de febrero en conmemoración del 5 de febrero, el tercer lunes de marzo en conmemoración del 21 de marzo, el 1 de mayo, el 16 de septiembre, el tercer lunes de noviembre en conmemoración del 20 de noviembre, el 25 de diciembre, y el día que determinen las leyes federales y locales electorales para efectuar la jornada electoral.
La propuesta de Aguirre Maldonado no solo busca armonizar las leyes laborales con la Constitución, sino también reconocer la importancia del día de cambio de presidencia como un evento de relevancia nacional. Según la diputada, esta medida permitiría a los trabajadores participar de manera más activa en las actividades cívicas y políticas de este día, fortaleciendo así la democracia y el compromiso ciudadano.
La discusión de esta iniciativa en la Comisión Permanente ha generado diversas opiniones entre los legisladores y la sociedad. Algunos ven con buenos ojos la propuesta, argumentando que un día de descanso adicional contribuiría al bienestar de los trabajadores y promovería la participación cívica. Otros, sin embargo, consideran que podría tener implicaciones económicas negativas, especialmente para sectores que no pueden detener sus operaciones.
A medida que avanza el debate, la propuesta de Aguirre Maldonado destaca la necesidad de actualizar las leyes para reflejar los cambios en la estructura política del país. La reforma, de ser aprobada, representaría un ajuste significativo en la legislación laboral mexicana, subrayando la importancia de la coherencia entre las diferentes normas que rigen la vida pública y laboral.