Clara Brugada ha sido oficialmente ratificada como la próxima Jefa de Gobierno, consolidando su victoria con un impresionante margen de 13 puntos porcentuales sobre su competidor más cercano. Este resultado marca un paso crucial en la consolidación del poder político de la coalición “Sigamos Haciendo Historia” en la capital mexicana.
Los cómputos distritales finalizados recientemente han certificado a Clara Brugada como la clara vencedora de las recientes elecciones, al haber obtenido el 51.90% de los votos, según los datos proporcionados por el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM). Esta cifra no solo se alinea con los pronósticos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) y los conteos rápidos, sino que también refleja una aceptación contundente de sus propuestas y liderazgo.
Brugada superó a Santiago Taboada, candidato de la coalición PRI-PAN-PRD, quien alcanzó el 38.85% de los votos, mientras que Salomón Chertorivski de Movimiento Ciudadano se quedó con el 7.37%. Estos resultados demuestran la división de preferencias en la ciudadanía pero consolidan a Brugada como una figura dominante en el espectro político de la CDMX.
Clara Brugada ha delineado una serie de iniciativas ambiciosas para su administración, que incluyen la mejora de infraestructura y servicios públicos, así como políticas inclusivas que beneficien a toda la población de la ciudad. Además, ha prometido retirar su propaganda electoral de las calles para convertirla en tabiques ecológicos, reflejando su compromiso con un gobierno responsable y sostenible.
Licenciada en Economía por la UAM, Clara Brugada ha tenido una larga y distinguida carrera en el servicio público, habiendo servido como diputada local y federal, así como senadora suplente antes de su papel como Jefa Delegacional en Iztapalapa. Su experiencia y liderazgo fueron cruciales en su reelección en 2021 y su reciente victoria en la jefatura de gobierno.
La ratificación de Brugada no solo es un testimonio de su popularidad y la eficacia de su campaña, sino que también es un indicativo de los deseos de cambio y continuidad política en la CDMX. Las cifras y la aceptación general sugieren que la población está expectante y optimista ante los cambios propuestos por Brugada para mejorar la ciudad.