En un notable fenómeno astronómico, el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha reportado cinco tormentas solares en tan solo 48 horas, destacando un incremento significativo en la actividad solar que ha impactado directamente a la Tierra desde el pasado viernes.
Estos eventos han sido causados por eyecciones de masa coronal, que son flujos de material solar expulsados hacia el espacio.
Durante los últimos diez días, dos regiones activas del sol han desencadenado múltiples tormentas, incluyendo nueve fulguraciones de clase X, las más intensas en la escala. Estas poderosas erupciones solares han perturbado las comunicaciones en las bandas de radio HF y afectando diversas tecnologías.
Además las eyecciones de masa coronal han provocado perturbaciones en el campo magnético terrestre, lo que trae consecuencias en satélites, telecomunicaciones, sistemas de navegación global y redes de energía eléctrica.
La situación se está estabilizando, ya que la tormenta geomagnética severa ha entrado en una fase de recuperación, durando más de 39 horas; ya registra signos de disminución en su intensidad.
Pese a esta recuperación, expertos en clima espacial de diferentes países han alertado sobre la posibilidad de una nueva tormenta solar en el horizonte, que podría traer consigo otra ronda de efectos geomagnéticos intensos y visibles como auroras boreales en latitudes medias del planeta.
Este fenómeno no solo plantea riesgos potenciales para la infraestructura tecnológica y energética, sino que también ofrece un espectáculo natural impresionante, recordando la poderosa influencia del sol sobre nuestro sistema planetario.
La comunidad científica y los observadores del espacio se mantienen alertas ante la evolución de esta actividad solar y sus posibles implicaciones.
