Celorio, durante la audiencia que inició a las 10:30 a.m. hora local, hizo hincapié en que Ecuador no solo transgredió los límites del derecho internacional, sino que su acción representa un precedente preocupante para la comunidad global. Citando el caso de los “Rehenes en Teherán”, recordó que la inviolabilidad de las instalaciones diplomáticas está protegida por la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, una norma fundamental y de obligado cumplimiento para los estados parte.
Además, destacó la preocupación respecto de las instalaciones diplomáticas mexicanas y las residencias privadas que ahora se encuentran vacías, toda vez que pueden ser objeto de interés por parte de Ecuador, lo que podría representar un riesgo de nuevas violaciones.